Piedritas de colores y un precepto de Darwin
Abstract
Escribía Carlos Darwin el 18 de Septiembre de 1861 a un amigo a propósito de explicar como había crecido la geología a partir del primer momento en que él ingresó a ella durante los cinco años de realizar su viaje en el HMS Beagle: Hace cosa de treinta años apareció una discusión en el sentido de que el geólogo debería limitarse a sólo observar y abstenerse de ingresar al mundo de las teorías; recuerdo que en ese debate alguien declaró que a ese paso un hombre podría dedicar su tiempo a una excavación de grava y dedicarse a contar todas las piedritas y describir sus colores. ¡Que extraño resultaba que no fuera evidente que toda observación debe ir acompañada de un dictamen de que lo encontrado apoya a favor o en contra de un punto de vista, si aspira uno a que la observación rinda un servicio!