Archivos Latinoamericanos de Producción Animal. 2024. 32 (4)
http://www.doi.org/10.53588/alpa.320404
191
Tips” para el desarrollo de la carrera de investigador:
un decálogo desde la experiencia personal
Rodolfo Ungerfeld
1
Recibido: 2024-08-29. Revisado: 2024-11-22. Aceptado:2024-11-28
1
Autor para la correspondencia: rungerfeld@gmail.com
Icon
Description
automatically
generated
U. A. Fisiología, Departamento de Biociencias Veterinarias, Facultad de Veterinaria,
Universidad de la República, Uruguay
Tips for developing a research career: a decalogue based on personal experience
Abstract. The number of people working in research activities is very low worldwide, even more so in Latin America.
This activity results from highly selective training processes, which have led to the development of a series of
recommendations to develop a research career based on personal experiences. These recommendations constitute a
general framework that must be adapted to each case. These recommendations have been grouped into 10 main points:
1. High dedication to the activity; 2. Passion for what is done; 3. Honesty in the way of proceeding; 4. Continuous
training and humility in the face of the unknown; 5. Teamwork and collaboration; 6. Development of board visions to
answer quality scientific questions; 7. Understanding that the results are consequences of the process itself; 8. Acquiring
and integrating specific, but also transversal knowledge; 9. Visualizing lines of work and scientific development beyond
each experiment; 10. Focusing on training new researchers. The activity of a researcher is exciting, but it also demands a
very high level of dedication, both in terms of time and skills. This career requires sustained, both short- and long-term
efforts. The environment in which the activity is carried out significantly influences the opportunities and possibilities, so
it is crucial to evaluate the context critically and seek the best strategies to consolidate the professional path. There is no
unique path to develop this career, and therefore, the points mentioned should be considered simply as the result of
personal experience. Ultimately, someone who should reflect and define their path is the person who wishes to
undertake a career as a researcher. I hope that these recommendations can serve as a helpful guide to facilitate that path.
Keywords: academy, learning, scientific, postgraduate
Resumen. La cantidad de personas que trabaja en actividades de investigación es muy baja a nivel mundial, y aún más
en Latinoamérica. Esta actividad es consecuencia de procesos de formación que son altamente selectivos, lo que ha
llevado a la elaboración de una serie de recomendaciones para desarrollar una carrera como investigador basadas en
experiencias personales. Estas recomendaciones constituyen un marco general que debe adaptarse a cada caso particular,
considerando el contexto en el que se desarrolla, y las condiciones disponibles. Las recomendaciones han sido
agrupadas en 10 puntos principales: 1. Alta dedicación a la actividad; 2. Pasión por lo que se hace; 3. Honestidad en la
forma de proceder; 4. Formación continua y humildad frente a lo desconocido; 5. Trabajo en equipo y colaboración; 6.
Desarrollo de visiones amplias para responder preguntas científicas de calidad; 7. Comprender que los resultados son
consecuencia del proceso en mismo; 8. Adquirir e integrar conocimientos específicos, pero también transversales; 9.
Visualizar líneas de trabajo y desarrollo científico más allá de cada experimento; 10. Enfocarse en la formación de
nuevos investigadores. La actividad del investigador es apasionante, pero también exige un nivel muy alto de dedicación,
tanto en términos de tiempo como de capacidades. Esta carrera requiere esfuerzos sostenidos, de corto y de largo plazo.
El entorno en el que se desarrolle la actividad influye de manera significativa en las oportunidades y posibilidades, por lo
que es crucial evaluar el contexto con visión crítica y buscar las mejores estrategias para consolidar el camino profesional.
No existe un único camino para desarrollar esta carrera, y por ello, los puntos mencionados deben considerarse
simplemente como el resultado de la experiencia de una persona. En última instancia, quién más debe reflexionar y
definir su propio camino es la persona que realiza o desea emprender una carrera como investigador. Espero que estas
recomendaciones puedan servir como una guía útil para facilitar ese recorrido.
Palabras clave: academia, aprendizaje, científico, posgrado
Ungerfeld
192
Dicas para desenvolver uma carreira de pesquisador: um decálogo baseado na experiência pessoal
Resumo. O número de pessoas que trabalham em atividades de investigação é muito baixo no mundo, ainda mais na
América Latina. Esta atividade é consequência de processos formativos altamente seletivos, o que levou ao
desenvolvimento de uma série de recomendações para desenvolver uma carreira de pesquisador baseadas em
experiências pessoais. Estas recomendações constituem um quadro geral que deve ser adaptado a cada caso particular,
considerando o contexto em que se desenvolve e às condições disponíveis. As recomendações foram agrupadas em 10
pontos principais: 1. Elevada dedicação à atividade; 2. Paixão pelo que se faz; 3. Honestidade nos procedimentos; 4.
Formação contínua e humildade diante do desconhecido; 5. Trabalho em equipe e colaboração; 6. Desenvolvimento de
visões amplas para responder questões cientificas de qualidade; 7. Compreender que os resultados são consequência do
próprio processo; 8. Adquirir e integrar conhecimentos específicos, mas também transversais; 9. Visualizar linhas de
trabalho e desenvolvimento científico para além de cada experiencia; 10. Ter como foco a formação de novos
pesquisadores. A atividade do investigador é estimulante, mas também exige um nível de dedicação muito alto, tanto em
termos de tempo como de competências. Esta carreira requer esforços sustentados, tanto a curto quanto a longo prazo.
O ambiente em que a atividade e desenvolvida influencia significativamente as oportunidades e possibilidades, pelo que é
crucial avaliar o contexto com uma visão crítica e procurar melhores estratégias para consolidar o percurso profissional.
Não existe um caminho único, por isso os pontos mencionados devem ser considerados tomados apenas como resultado
da uma experiência pessoal. Em última análise, quem mais necessita de refletir e definir o seu próprio caminho e aquele
que prossegue ou pretende enveredar pela carreira de investigador. Espero que estas recomendações possam servir como
um guia útil para facilitar esse caminho.
Palavras chave: academia, aprendizagem, científico, pós-graduação
ISSNL 1022 1301. Archivos Latinoamericanos de Producción Animal. 2023. 32 (4):191-198
Hace algún tiempo, una estudiante de otro país
latinoamericano me escribió para pedirme algunos
consejos como parte de un trabajo para un curso de
posgrado que estaba realizando. Me explicó que su tarea
consistía en “ponerse en contacto con un científico
internacional para solicitar recomendaciones o
sugerencias, para que yo logre convertirme en un
investigador de calidad”. A partir de este intercambio,
comenzamos a enviarnos varios correos electrónicos, y de
esa comunicación surgieron 15 recomendaciones basadas
en mi experiencia personal. Estas se enriquecieron con lo
que he aprendido a través del contacto e intercambio con
otros grupos de investigadores de mi país como de otros
países, especialmente de América Latina, además de mi
experiencia en la dirección de estudiantes de posgrado en
distintos países. En este artículo he intentado organizar y
desarrollar de manera más amplia las ideas que le
compartí en aquel momento a la estudiante esperando
que también puedan ser útiles para otros estudiantes e
investigadores jóvenes.
Los puntos propuestos originalmente presentaban ciertas
superposiciones entre sí, por lo que para esta propuesta
fueron reorganizados en 10 puntos. Sin embargo, cuando
se formulan recomendaciones para el desarrollo de
actividades que, por su naturaleza están profundamente
interrelacionadas, es inevitable que exista alguna superpo-
Introducción
sición entre ellas. Por esta razón, algunos puntos todavía
comparten elementos en común de forma parcial. Cabe
destacar que algunos de los puntos mencionados
adquieren mayor importancia al inicio de la carrera de
investigador, mientras que otros cobran mayor peso en la
etapa de consolidación en la carrera de investigador. Lo
fundamental es que cada persona, desde su propia
realidad, reflexione sobre estas recomendaciones y trace
su propio camino, dado que una característica particular
de la actividad científica es no poder ser estandarizable.
Quiero aclarar que, como ya mencioné, este artículo se
basa en mi experiencia personal. Por lo tanto, la primera
recomendación es que estos puntos se analicen siempre
en relación con el contexto, momento y las experiencias
particulares de cada persona. El camino hacia el desarrollo
como investigador es un proceso exigente, lleno de
recompensas que reconfortan, pero también de
frustraciones y decepciones. Este recorrido es
profundamente personal e irrepetible, lo que convierte a
la experiencia propia en la principal fuente de aprendizaje
y retroalimentación. Todo lo demás, como lo indica el
título de este artículo, son simplemente tips a
considerar o descartar. El orden en el que se presentan
los puntos no responde a una prioridad específica.
Algunos aspectos son generales y fundamentales para la
esencia misma de la investigación, mientras que otros
Decálogo para la carrera de investigador
193
dependen claramente de las circunstancias y necesidades
particulares de cada caso.
1. Alta dedicación a la actividad
La formación que abarca desde los estudios preescolares
hasta la finalización de un posgrado puede compararse
con un embudo ya que la cantidad que alcanza las etapas
finales es muy baja en relación a la población que inicia.
Más allá de las causas que explican este fenómeno, e
incluso en aquellos países logran fomentar la permanencia
en el sistema educativo hasta sus niveles más avanzados,
el porcentaje de la población con estudios de posgrado
sigue siendo reducido. Por ejemplo, en los países de la
OCDE, el promedio de personas de entre 25 y 64 años
con un doctorado es apenas superior al 1%. Sin embargo,
el primer país latinoamericano en esta lista registra menos
de una décima parte de esa cifra (OECD, 2021). Además
de este porcentaje tan bajo, no todos los que completan
un doctorado llegan a consolidarse como investigadores.
A nivel internacional se reconoce que aún luego de
obtener el doctorado, el proceso de consolidación como
investigador puede extenderse durante varios años más
(Boyington, 2024). Por ejemplo, la European Commission
(2011) define cuatro etapas en la carrera de un
investigador, de las cuales los estudios doctorales
constituyen solo la primera. Esta etapa es seguida por dos
períodos posdoctorales: uno en un contrato transitorio, y
otro como investigador “junior”. Estas dos fases pueden
prolongarse hasta 10 años en conjunto antes de que el
investigador alcance una posición consolidada (USL,
2024).
Todo lo anterior demuestra que alcanzar la formación
como investigador exige una gran persistencia y
dedicación (Gisbert y Chaparro, 2020). Además del
extenso tiempo requerido para consolidar determinados
procesos de formación e independencia científica, es
importante tener en cuenta que la actividad de
investigación es altamente demandante, tanto en términos
de tiempo como de compromiso personal. Aunque
muchas tareas pueden ser planificadas y organizadas,
resulta difícil limitar esta actividad a horarios estrictos. Por
ejemplo, los trabajos experimentales con animales no
siempre pueden ajustarse a horarios predefinidos, ya que
actividades como el registro de datos, la recolección de
muestras o diversas tareas relacionadas dependen de las
necesidades del experimento. Esto significa que muchos
experimentos no respetan los límites de horarios
laborales, fines de semana o feriados, invadiendo
inevitablemente aspectos de la vida personal. Sin duda,
esto representa un desafío importante. Sin embargo,
restringir el trabajo a horarios laborales podría limitar
significativamente las posibilidades de estudio, afectando
tanto la calidad de las hipótesis planteadas como los
procedimientos experimentales diseñados para
responderlas. Además, en los experimentos con animales
existe una demanda adicional vinculada al cuidado y
mantenimiento de los mismos. Aunque pueda haber
personal especializado encargado de estas tareas, es
necesario que los responsables de los experimentos
supervisen continuamente dichas actividades.
Durante la carrera de investigador, a medida que se
asumen más responsabilidades, surgen otros tipos de
compromisos que, si bien pueden ser más flexibles en
términos de horarios, suelen tener plazos que exigen una
dedicación adicional en determinados momentos.
Actividades como la presentación de propuestas a fondos
concursables, las evaluaciones de proyectos, artículos o
estudiantes, el cumplimiento de los plazos de los
estudiantes, y las interacciones con investigadores de otros
países (frecuentemente con diferencias horarias), difi-
cultan la posibilidad de establecer horarios predefinidos.
Más allá de estos ejemplos, la actividad implica demandas
constantes que obligan a la persona a dedicar un gran
esfuerzo y tiempo para cumplir con ellas.
Además de dedicación y perseverancia, es fundamental
estar preparado para superar situaciones que pueden
generar frustración, como proyectos no financiados,
artículos rechazados, problemas de funcionamiento
institucional, entre otros desafíos. Por esta razón, la
personalidad y el compromiso tienen un papel clave en los
resultados, el desarrollo profesional y los logros
alcanzados. En resumen, quien decida emprender una
carrera como investigador debe tener claro que, aunque se
trate de una actividad altamente gratificante, exige un
elevado nivel de dedicación y perseverancia.
2. Pasión por lo que se hace
Esto es fundamental, ya que es importante comprender
que no es posible tener éxito en la investigación siguiendo
un esquema de trabajo similar al de muchos otros
empleos. Quien se dedique a esta labor debe hacerlo con
pasión y compromiso, ya que estos son esenciales para
alcanzar logros significativos. La investigación presenta
desafíos nuevos cada día, y abarca una amplia variedad de
actividades, que van desde el trabajo de escritorio y
estudio, hasta el manejo de animales, el trabajo en
laboratorio, el análisis de datos, la redacción, las reuniones
de discusión, la interacción con otros investigadores, la
enseñanza, la formación de personas y la gestión de
proyecto. Es, en esencia, una actividad muy dinámica, y
siempre cambiante.
ISSNL 1022 1301. Archivos Latinoamericanos de Producción Animal. 2023. 32 (4):191-198
Ungerfeld
194
Si bien algunos aspectos pueden planificarse, muchos
otros dependen de los resultados obtenidos, de las
oportunidades que surgen, de convocatorias abiertas, de
nuevas colaboraciones o de las preguntas que surgen tras
cada nuevo hallazgo. Esta naturaleza impredecible y
variada de la investigación hace que sea difícil avanzar si la
persona no siente entusiasmo por enfrentarse
continuamente a nuevos desafíos.
3. Honestidad en la forma de proceder
Como en cualquier actividad humana, es posible cometer
errores, pero existe una gran diferencia entre equivocarse
y actuar de manera deshonesta. Vivimos en un mundo
competitivo, y la actividad científica no está exenta de ello.
Por el contrario, la ciencia implica un alto grado de
competencia. Factores como el acceso a fondos,
posiciones académicas, cargos, y las oportunidades que
esto genera fomentan de manera indirecta, una
competencia constante. En este contexto, la carrera por
alcanzar una mayor productividad científica se convierte
en un factor clave para acceder a estos recursos.
El problema surge cuando esta competencia desvirtúa los
procedimientos éticos y profesionales. Los resultados
deberían ser fruto de un trabajo bien realizado, no de
prácticas deshonestas. Los atajos éticamente cuestionables
son cada vez más frecuentes, incluyendo prácticas como la
publicación en editoriales de dudosa calidad científica, y
en ocasiones, carentes de estándares éticos mínimos
(Ungerfeld, 2018; 2024: Oviedo-Garcia, 2021). Aunque
estas prácticas pueden ofrecer resultados aparentes a corto
plazo, a medida que los sistemas de evaluación científica
se adapten a esta nueva realidad, tomar estas vías debería
acarrear consecuencias negativas para las carreras
personales. El ámbito científico es mucho más pequeño
de lo que parece, y la manera de proceder y trabajar de
cada persona se conoce con relativa facilidad. Por ello,
mantener la integridad y el rigor ético es fundamental para
el desarrollo de una carrera científica sostenible y
respetada.
4. Formación continua y humildad frente a lo
desconocido
Además de integrar el conocimiento, un investigador debe
tener claro que lo más importante no es lo que ya se
conoce, sino lo que aún se desconoce. Esto implica ubicar
los propios aportes dentro del cuerpo general del
conocimiento y ser consciente de que, por mucho que
avancemos, lo que sabemos siempre será una fracción
mínima frente a lo que queda por descubrir. El verdadero
desafío consiste en explorar lo desconocido apoyándose
en lo conocido, pero siempre mirando hacia el vasto
abismo de lo inexplorado. Esta visión tiene que ser
integrada y estar siempre presente, recordándonos que la
esencia de la investigación es el constante avance, aunque
los aportes de un investigador o un grupo, por solos,
sean limitados dentro del amplio contexto del
conocimiento.
En investigación, nunca se llega a una meta definitiva ni se
completa el proceso. Cada experimento responde algunas
preguntas, pero también genera muchas más, lo que
evidencia que la propia actividad es un aprendizaje
continuo. Por ello, es fundamental tener la humildad de
reconocer que lo que uno sabe es siempre muy poco. El
aprendizaje implica sumar diferentes perspectivas y
aportes, interactuar con personas que tienen enfoques
diversos, ya sea desde otras disciplinas, otras formas de
abordar la investigación científica, o incluso
aproximaciones distintas dentro de un mismo tema.
Además, el conocimiento en un área avanza
simultáneamente en otros lugares, países y contextos, lo
que hace indispensable mantenerse en constante
actualización. Aprender de lo que otros están haciendo y
detectar nuevas preguntas que surgen a partir de estas
interacciones es clave para avanzar y enriquecer el trabajo
propio. En este sentido, la investigación no es un camino
aislado, sino un proceso colectivo y dinámico que se nutre
de la colaboración y el intercambio de ideas.
5. Trabajo en equipo y colaboración
La ciencia es, ante todo, una actividad social, en la que los
mejores resultados surgen de la interacción y la
colaboración entre científicos. Ninguno de nosotros
puede abarcar por completo un área de trabajo, por lo que
resulta esencial buscar a personas que puedan
complementar nuestras limitaciones, aportando
perspectivas, herramientas y capacidades que no
poseemos. Si bien las instituciones suelen organizar sus
departamentos o secciones en torno a disciplinas
específicas, abordar preguntas científicas suele requerir
enfoques interdisciplinarios. Esto implica buscar
activamente colaboradores que ofrezcan otras visiones,
metodologías y técnicas que enriquezcan el trabajo y
permitan obtener respuestas más completas.
Adoptar este enfoque evita caer en el círculo vicioso de
formular únicamente preguntas en función de que puedan
ser resueltas con las capacidades existentes, lo que
restringe el progreso. En tales casos, las preguntas
terminan definiéndose en función de las herramientas
disponibles y no en función de los problemas relevantes.
ISSNL 1022 1301. Archivos Latinoamericanos de Producción Animal. 2023. 32 (4):191-198
195
Esta tendencia, que responde a la inclinación humana de
operar dentro de la zona de confort, en ciencia conduce a
“hacer más de lo mismo”. Es decir, en lugar de generar las
condiciones necesarias para responder preguntas
importantes, se generan preguntas “a medida” de las
capacidades actuales, lo que rara vez permite avances
significativos.
Por otro lado, las colaboraciones científicas no solo
aportan nuevas herramientas y enfoques, sino que
también contribuyen a refinar y mejorar las preguntas de
investigación. Al interactuar con personas externas a
nuestra área inmediata de trabajo evitamos los sesgos
naturales que todos los científicos desarrollamos dentro
de nuestras especialidades. Estas interacciones amplían
nuestras perspectivas y enriquecen la forma de concebir la
investigación.
La interacción con otros investigadores, especialmente de
diferentes instituciones o países, representa una valiosa
oportunidad de aprendizaje. No solo potencia el trabajo
puntual en desarrollo, sino también la capacidad de pensar
y planificar los proyectos futuros. En este sentido es
importante ser proactivos y aprovechar estas
colaboraciones como oportunidades para aprender no
solo sobre nuevas formas de abordar problemas
científicos, sino también sobre cómo entender el
desarrollo de la ciencia, fomentar la construcción
institucional y adoptar diferentes maneras de pensar.
Estos aprendizajes trascienden el alcance de cada proyecto
individual y contribuyen al crecimiento integral del
investigador.
6. Desarrollo de visiones amplias para responder
preguntas científicas de calidad
Para ello, es fundamental que quien lidere un trabajo de
investigación tenga una visión amplia. Esto significa no
quedarse atrapado exclusivamente en una línea de trabajo,
sino tener la capacidad de entrar y salir de ella; de
observar las preguntas concretas tanto desde un
conocimiento profundo del tema, como desde una
perspectiva externa. Este enfoque permite abordar las
preguntas partiendo de una mirada amplia para luego
enfocarse en los aspectos específicos, sin perder nunca el
contexto general. Cultivar esta habilidad está
estrechamente relacionado con lo mencionado
anteriormente, ya que facilita una mejor comprensión de
los enfoques necesarios para responder cada pregunta.
Además, es esencial que un investigador aproveche su
curiosidad natural para explorar otras áreas y familiarizarse
con temas diferentes. Al igual que ocurre con nuestra
comprensión de la realidad cultural, social o histórica, que
mejora al conocer otras perspectivas, en la investigación
ocurre lo mismo. Limitarnos exclusivamente a nuestro
campo reduce nuestra capacidad de análisis y creatividad.
Si bien es cierto que hay excelentes investigadores
dedicados de manera exclusiva a la ciencia, la amplitud y
libertad con que una persona piensa están directamente
relacionadas con la diversidad de experiencias y esferas de
su vida que alimenten su visión. En este sentido, es difícil
ser un buen investigador si el único foco de la persona es
la investigación en misma.
Por ello es importante contar con espacios y desarrollar
intereses que vayan más allá de la investigación. Estas
actividades complementarias no solo enriquecen la
perspectiva personal, sino que también tienen un impacto
positivo en la calidad de las preguntas científicas que se
plantean. Cada persona encontrará sus propios intereses y
motivaciones, pero lo fundamental es partir de la idea de
que no se puede ser excelente en un campo si se
desconoce todo lo demás. Ampliar horizontes y cultivar
otras pasiones no solo forma a un investigador más
completo, sino que también mejora significativamente su
capacidad para innovar y plantear preguntas relevantes en
su trabajo.
7. Comprender que los resultados son consecuencia
del proceso en mismo
Aunque esta idea puede parecer obvia, es muy frecuente
que este proceso se invierta, definiendo las actividades en
función del resultado deseado. Por ejemplo, la fuerte
presión para publicar resultados científicos presente en
muchos países a menudo desvirtúa el objetivo principal
(Ungerfeld, 2024). En lugar de enfocarse en generar
conocimiento original, que, como consecuencia natural,
conduzca a publicaciones se termina priorizando la
formulación de preguntas con el único objetivo de
publicar. Este enfoque basado exclusivamente en obtener
resultados inmediatos puede ser efectivo a corto plazo,
pero probablemente limite la calidad y el impacto del
desarrollo científico a largo plazo.
Por el contrario, cuando se asume que los resultados
deben ser una consecuencia natural del proceso bien
realizado, el énfasis se pone en la calidad del trabajo. Esto
suele traducirse en un impacto mucho de mucha mayor
calidad en los resultados obtenidos. En otras palabras,
priorizar el proceso por encima del resultado inmediato
permite un desarrollo más sólido y sostenible en el
tiempo.
Decálogo para la carrera de investigador
ISSNL 1022 1301. Archivos Latinoamericanos de Producción Animal. 2023. 32 (4):191-198
Un problema asociado a esta forma de proceder es la
presión por los tiempos y la necesidad de alcanzar logros
personales rápidamente. Si bien esto puede ser
comprensible, alcanzar ciertas posiciones o cargos sin
haber consolidado un desarrollo científico adecuado para
ocuparlos solo limitará el desempeño futuro. Asumir una
posición sin contar con la capacitación necesaria para
ejercerla de manera óptima demuestra únicamente que se
logró acceder al cargo, pero no contribuye a generar
capacidades reales. Esto no solo puede limitar el impacto
del trabajo realizado, sino que también podría afectar el
desarrollo posterior de la carrera científica.
Lamentablemente, esto se traduce muchas veces en el uso
de atajos para lograr publicaciones, lo que muchas veces
termina en publicaciones en revistas predatorias o
ilegítimas (Ungerfeld, 2024).
8. Adquirir e integrar conocimientos específicos,
pero también transversales
El desarrollo científico requiere una gran dedicación al
estudio y a la comprensión en profundidad del estado del
arte en la temática trabajada. Sin embargo, los
conocimientos necesarios para llevar adelante un
proyecto de investigación no se limitan únicamente a los
aspectos específicos del tema. Quien lidera trabajos de
investigación debe dominar herramientas transversales
que permiten optimizar los procedimientos en cada etapa
del proceso. Esto implica manejar el uso adecuado de
bibliografía, comprender como diseñar un experimento,
planificar la logística necesaria para su ejecución,
garantizar la rigurosidad en la realización de las
actividades, entender los métodos estadísticos adecuados
y dominar principios básicos de la redacción científica.
Un error en cualquiera de estas etapas no solo puede
provocar el fracaso del trabajo, sino también llevar a
conclusiones equivocadas, lo que puede tener consecuen-
cias negativas aún mayores.
Además, un investigador debe destinar parte de su tiempo
a la gestión, ya que dirigir proyectos y experimentos
requiere habilidades administrativas con una visión
científica. Esto incluye planificar con antelación, gestionar
los recursos disponibles y adelantarse a posibles
problemas. La coordinación del trabajo entre diferentes
personas, aunque desafiante, es una parte fundamental de
la investigación y resulta crucial para que los experi-
mentos se lleven a cabo con éxito. También es
importante reconocer que la actividad investigadora, en
algunas etapas, puede ser altamente demandante, lo que
puede generar dificultades prácticas para los involucrados.
Cada miembro del equipo, incluyendo estudiantes, tiene
fortalezas y debilidades únicas. Por ello, al coordinar activi-
dades dentro de un grupo, es imprescindible identificar
estas características tanto a nivel individual como
colectivo para maximizar las posibilidades de éxito.
Un liderazgo efectivo requiere no solo conocimiento
técnico, sino también sensibilidad para manejar estas
diferencias y construir un equipo equilibrado que
funcione de manera eficiente en todas las etapas del
proceso de investigación.
9. Visualizar líneas de trabajo y desarrollo científico
más allá de cada experimento
Frecuentemente resulta difícil visualizar cómo un
experimento específico puede contribuir al desarrollo de
líneas de investigación más amplias. Sin embargo,
concebir los experimentos desde preguntas científicas
permite entender que los problemas de la realidad no se
resuelven completamente con uno o incluso varios
experimentos. Las respuestas prácticas, la aplicación de
conocimientos o el desarrollo de nuevas técnicas suelen
requerir procesos largos y no lineales, que son el resultado
de muchos trabajos realizados por diferentes grupos de
investigación. Por esta razón, es importante concebir
cada trabajo dentro del contexto de una línea de
investigación más amplia.
Esto implica que en muchas ocasiones sea necesario
plantear trabajos cuyos resultados sirvan como base para
los estudios futuros, que son los que realmente tendrán
un impacto relevante. Aunque no todos los trabajos
generen el mismo nivel de productividad científica de
forma inmediata, muchos son indispensables para el
avance de las líneas de investigación. Realizar estudios
comprendiendo que son necesarios para formular nuevas
preguntas relevantes puede ser una parte fundamental del
desarrollo estratégico de una línea de trabajo.
Al inicio de una carrera investigadora, o cuando se
comienza a asumir las primeras responsabilidades, suele
ser difícil adoptar esta perspectiva más amplia. Sin
embargo, es importante concebir estas actividades como
parte de una etapa de formación, visualizándolas como
hitos en un camino más largo. Comprender lo que cada
trabajo aporta a la formación personal y al progreso de
las líneas de investigación ayuda no solo a ampliar la
visión, sino también a reconocer que cada estudio forma
parte de una estrategia de desarrollo y crecimiento
científico integral.
Es fundamental que la ansiedad, tan común en las etapas
iniciales de formación, no impida visualizar este camino a
largo plazo. Al entender que cada trabajo no solo busca
responder una pregunta específica, sino que se enmarca
Ungerfeld
196
ISSNL 1022 1301. Archivos Latinoamericanos de Producción Animal. 2023. 32 (4):191-198
en un plan más amplio de progreso y aprendizaje, se logra
una mayor claridad y propósito en la labor científica. Esta
perspectiva es clave para construir una carrera sólida y
sostenible en la investigación.
10. Enfocarse en la formación de nuevos
investigadores
La formación en investigación es un proceso costoso que
requiere una gran dedicación, esfuerzo colectivo, tiempo,
interacciones constantes, y ajustes continuos en los
procesos. Hace ya muchos años que quedó atrás la idea
de la formación científica autodidacta, ya que es un camino
poco eficiente. Los investigadores se forman trabajando
junto a otros investigadores, inmersos en laboratorios de
investigación, interactuando con otros estudiantes y con
miembros de otros grupos científicos. Durante las etapas de
formación, es crucial integrarse en entornos académicos,
absorber conocimientos, visiones y experiencias de otros
investigadores. Si bien las tecnoloas de la comunicación
facilitan muchas posibilidades, no sustituyen la interacción
directa y continua. Es en el intercambio personal y cotidiano,
especialmente con quienes piensan de manera diferente,
donde realmente se fortalece el aprendizaje, y esta dimica
rara vez surge espontáneamente a distancia.
No todas las instituciones de investigación tienen un foco en
la formación de nuevos investigadores, pero todos, en algún
momento de nuestras carreras, nos beneficiamos de contar
con espacios de trabajo y aprendizaje guiados por
investigadores más experimentados. La participación de
estudiantes de grado o posgrado en estos entornos no solo
es una oportunidad invaluable para su formación, sino que
también representa una gran responsabilidad para quienes
dirigen los proyectos. La prioridad del tutor debe ser el
desarrollo del estudiante, asegurándose de que la experiencia
sea enriquecedora y formativa. Lamentablemente, en
ocasiones este enfoque se desvirtúa, y la dirección de un
estudiante se convierte en un medio para alcanzar los
objetivos del tutor, perdiendo así la esencia de la actividad
(Ungerfeld, 2022).
En este sentido, el investigador más exitoso no es aquel que
acumula más logros personales, sino el que sabe cómo lograr
lo mejor de cada estudiante, ayudándolos a alcanzar su
ximo potencial. La verdadera medida del éxito en la
formación científica reside en la capacidad de inspirar y
formar a la próxima generación de investigadores,
asegurando que puedan construir sus propios caminos y
contribuir al avance del conocimiento.
Decálogo para la carrera de investigador
197
ISSNL 1022 1301. Archivos Latinoamericanos de Producción Animal. 2023. 32 (4):191-198
Conclusiones
La actividad del investigador es profundamente fascinante,
capaz de cautivar a quienes sienten curiosidad por el conocí-
miento y pasión por desentrañar sus misterios. Sin embargo,
esta carrera es también altamente exigente, demandando no
solo tiempo y esfuerzo sostenidos, sino tambn un compro-
miso constante a corto y largo plazo. El entorno en que se
desarrolla la investigación desempeña un papel central en las
oportunidades y posibilidades que se presentan, por lo que es
importante que cada persona sea crítica con su contexto, y
evalúe las mejores estrategias para consolidar su trayectoria.
No existe un camino único para avanzar en esta
profesión, y por esta misma razón, las reflexiones y
recomendaciones planteadas deben tomarse como el
resultado de la experiencia personal. En última instancia,
quién debe reflexionar, cuestionar, y construir su propio
camino es la persona que lo está llevando adelante, o que
se interesa por emprender la carrera de investigador.
Espero que estos aportes puedan servir como una guía
que facilite y enriquezca ese recorrido único y personal.
Conflicto de interés: No existe conflicto de interés
Financiamiento: No requirió financiamiento
Editado por: Omar Araujo-Febres
Literatura Citada
Boyington, A., 2024. How to become a research scientist:
what to know. forbes advisor. Disponible en
https://www.forbes.com/advisor/education/science/
how-to-become-a-research-scientist/ (accedido el
22/8/2024)
European Commission, Directorate General for Research
& Innovation, 2011. Towards a European framework
for research careers. Disponible en
https://euraxess.ec.europa.eu/sites/default/files/poli
cy_library/towards_a_european_framework_for_rese
arch_careers_final.pdf (accedido el 22/8/2024).
Gisbert, J. P., Caparro M., 2020. Reglas y consejos para
ser un investigador de éxito. Gastroenterol Hepatol.
43:540-550.
https://doi.org/10.1016/j.gastrohep.2020.03.010
https://doi.org/10.1016/j.gastrohep.2020.03.010
OECD (2021), OECD Science, Technology and
Innovation Outlook 2021: Times of Crisis and
Opportunity, OECD Publishing, Paris. Disponible en
https://doi.org/10.1787/75f79015-en. (accedido el
22/8/2024)
Oviedo-García, M.A., 2021. Journal citation reports and
the definition of a predatory journal: The case of the
Multidisciplinary Digital Publishing Institute (MDPI).
Research Evaluation, 2021:115.
https://doi.org/10.1093/reseval/rvab020
Ungerfeld, R., 2018. Por qué no publicar en “revistas
predatorias”. Nota editorial. Veterinaria (Uruguay)
54:4.
http://www.scielo.edu.uy/scielo.php?script=sci_artte
xt&pid=S1688-48092018000200004
Ungerfeld R., 2022. Reflexiones sobre la formación de
estudiantes de posgrados académicos, y la
consistencia entre los procesos y los objetivos de
formación. Archivos Latinoamericanos de
Producción Animal 30:149 153.
https://doi.org/10.53588/alpa.300301
Ungerfeld R., 2024. Publish or perish: the trap of
predatory and illegitimate journals. Agrociencia
Uruguay 28:28:e1612.
https://doi.org/10.31285/AGRO.28.1612
USL, 2024. Etapas de la carrera investigadora.
Universidad de Santiago de Compostela. Disponible
en https://www.usc.gal/es/investigar-en-la-
usc/hrs4r/formacion-desarrollo/etapas-carrera-
investigadora (accedido el 22/8/2024)
ISSNL 1022 1301. Archivos Latinoamericanos de Producción Animal. 2023. 32 (4):191-198
Ungerfeld
198